Este análisis está basado en la "Guía de Usuario" publicada por ISACA y AICPA para este tipo de informes.
Para aquellos que no lo sepan, comenzaremos explicando qué son los informes SOC 2 (sucesores de los famosos informes SAS 70). Para empezar SOC significa Controles de Organizaciones de Servicio (Service Organization Controls) y existen tres tipos de estos informes:
La diferencia entre los informes SOC 2 y SOC 3 es que, mientras que el primero incluye el entendimiento detallado del diseño de los controles y las pruebas realizadas por el auditor, el segundo solo incluye la opinión del auditor sobre si dichos controles son efectivos. Por este motivo, los informes SOC 2 son informes de uso restringido (lista de distribución definida y otros, con la autorización de la organización de servicios), mientras que los SOC 3 pueden ser publicados libremente a través del portal de AICPA, ya que están orientados a usuarios que no necesitan una información tan profunda.
Centrándonos en los informes tipo SOC 2, comentar que existen también dos tipos: los Tipo 1 (solo diseño de controles y en un momento del tiempo) y los Tipo 2 (diseño y efectividad de los controles durante el período de tiempo cubierto).
Finalmente, todos los informes SOC 2 tienen el mismo contenido:
En definitiva, los informes SOC 2 suponen un esfuerzo de normalizar los informes de auditoría, de forma que puedan ser reaprovechados y comprendidos por todos sus potenciales usuarios de la manera más sencilla posible.
Y aunque, evidentemente, suponen un gran avance, aún siguen exigiendo del potencial usuario un gran esfuerzo de interpretación que, para nosotros, es su mayor debilidad ya que obliga a dicho usuario a:
En definitiva, aunque es método que puede ser útil para algunas ocasiones, no solventa el problema de la flexibilidad necesaria para este tipo de entornos y sigue requiriendo un esfuerzo interpretativo y conocimientos elevados para los potenciales usuarios de los servicios.
Desde leet, como agencia de calificación de seguridad, consideramos que el método que proponemos es más intuitivo y más flexible, puesto que más que establecer unos niveles mínimos de controles, se define una métrica para que proveedor y usuario lleguen a un punto de encuentro entre lo que necesita el uno y ofrece el otro.